Acabando con el Miedo en Colombia
Ra煤l estaba subiendo la monta帽a llena de 谩rboles cerca de su casa en zona rural en Colombia cuando se par贸 sobre un alambre de tropiezo de una mina antipersonal. En el momento en el que ocurri贸 la explosi贸n, Ra煤l vol贸 hacia atr谩s y qued贸 inconsciente. Cuando retom贸 conciencia, estaba sobre la base de un 谩rbol, sin sentir nada en su espalda. El impacto de la mina antipersonal quebr贸 su pierna, espalda y cr谩neo. Eventualmente, llorando, pudo pedir auxilio a sus vecinos para que pudieran ayudarlo.
Durante las 煤ltimas cinco d茅cadas, Colombia ha estado en conflicto por cuenta de los grupos armados ilegales. Los artefactos explosivos improvisados (clasificados como minas antipersonal en Colombia), han sido enterrados en las 谩reas rurales, devastando a las comunidades locales. Esto, no solo pone en peligro las vidas de los habitantes de estas 谩reas, tambi茅n destruye sus formas de vida restringiendo el uso de la tierra y evitando que puedan acceder a servicios b谩sicos, como escuelas y hospitales. Dando respuesta a este legado del conflicto, HALO ha venido apoyando a las comunidades en Colombia desde 2013 y ha despejado m谩s de 150 谩reas peligrosas en el pa铆s.
鈥淪e siente como si me hubieran olvidado, necesitamos ayuda para no ahogarnos鈥. La vida de Ra煤l cambi贸 para siempre cuando pis贸 un alambre de tropiezo de una mina antipersonal en 2007.
Para Ra煤l, quien antes del accidente trabajaba en agricultura, su esposa Rubiela y sus cuatro hijos, el conflicto ha tenido un gran impacto en sus vidas. Siempre han vivido en Puerto Lim贸n, una comunidad rodeada de cultivos de caf茅 y montanas inclinadas en la cordillera de los Andes en el departamento del Tolima. Pero, en 2007, su vida cambio para siempre cuando Ra煤l pis贸 un alambre de tropiezo de una mina antipersonal mientras recolectaba madera en una de las monta帽as, sufriendo graves heridas. Desde el d铆a del accidente, Ra煤l no ha podido trabajar, su pierna no ha sanado del todo y permanece inclinada hacia un lado, lo que impide que pueda caminar bien y que tenga que utilizar una ca帽a para desplazarse. Su espalda le duele tanto que tiene problemas para montar su caballo por largos periodos de tiempo y cuando lo hace, debe permanecer hasta tres d铆as en cama por el dolor.
Ra煤l no ha podido trabajar desde el accidente, por lo tanto, su esposa Rubiela, cultiva el caf茅 en su terreno y lo vende en el mercado local a fin de sostener a su familia.
La presencia de minas antipersonal ha atemorizado a la familia por muchos a帽os, incluso antes del accidente de Ra煤l. Cerca de su casa, la se帽alizaci贸n roja evidencia la amenaza, identificando el 谩rea peligrosa el Platanillal que rodea el 煤nico camino a la casa. En 2002, un grupo armado ilegal tuvo un campamento all铆, dici茅ndole a la comunidad local que se alejaran porque hab铆an sembrado minas. Siempre ha sido una fuente de miedo, pero en mayo de 2018, gracias al apoyo de los gobierno de Noruega y Estados Unidos, HALO inici贸 operaciones en el 谩rea.
Rubiela hace su mejor esfuerzo para apoyar a su esposo e hijos mientras arregla la casa, cuida a los animales, prepara el caf茅 para que se seque y poder venderlo en el mercado a fin de llegar a fin de mes con sustento suficiente. 鈥淣adie deber铆a vivir as铆鈥, afirma Rubiela. En Colombia hay m谩s de 11,500 v铆ctimas de minas antipersonal registradas y el gobierno est谩 comprometido en asegurar el bienestar de todas las v铆ctimas del conflicto. Mientras Rubiela prepara el caf茅, Ra煤l explica, 鈥渟e siente como si nos hubieran olvidado, necesitamos ayuda para no ahogarnos鈥.
A veces, los retos que enfrentan Ra煤l y Rubiela parecen imposibles de superar, sin embargo, saber que HALO est谩 despejando a su alrededor, les da tranquilidad. Pronto, no tendr谩n que preocuparse porque sus hijos puedan salir lastimados por uno de estos artefactos, haciendo que Ra煤l y su familia se sientan cada d铆a m谩s seguros.
HALO inici贸 operaciones de despeje en el 谩rea el Platanillal en mayo de 2018. Esta 谩rea rodea el 煤nico camino a la casa de Ra煤l y su familia. Ra煤l afirma que sabiendo que HALO destruir谩 los artefactos explosivos se sentir谩n m谩s seguros.